DISTRIBUCION DE VINOS: creando nuevos modelos de negocios ante el covid-19.

Todos recordaremos este 2020 como el año que nos cambió la vida. Esta pandemia ha obligado a todos los países del planeta a recalcular el norte, redefinir sus las prioridades, recapitalizar los servicios públicos y a rediseñar el concepto de bienestar.  

La industria del vino ha sido duramente golpeada por las consecuencias que ha tenido el cierre de su principal via de comercialización cotidiana, primro fue por el confinamiento general y luego por los posteriores cierres y las reducciones de aforo en su principal fuente de distribución: bares, restaurantes, hostelería y sector ocio en general. Y en estos días con el toque de queda que muchas regiones están llevando a las 22.00horas, será la puntilla final para muchos que no volverán a levantar la persiana.

¡Aquellos maravillosos tiempos!

El efecto dominó que se ha sentido en toda la cadena de suministro de bebidas; desde los productores de vino, cerveceros, destiladores y luego a través de sus importadores, distribuidores hasta los puntos de venta de la hostelería, que no han podido vender sus productos en destino, está poniendo al sector al límite y está llevando al sector a crear nuevos modelos de negocio; ¡reinventarse o morir!

Creando nuevos modelos de negocio

Para muchos importadores, ha significado no poder comerciar en absoluto. O al menos no poder llegar a su base habitual de clientes.

La mayoría de los principales proveedores de bebidas confiaban en el comercio para la mayor parte de sus negocios, basado en un método tradicional, que llevaba a que fuera un negocio donde el componente de crear nuevos vinos cada año, con una gran relevancia en la parte de las relaciones personales para transmitir esa la historia que hay detrás de cada bodega y donde la visita a la bodega para disfrutar del tiempo al compartir horas  catando novedades y viejas joyas de la bodega, rodeaba de un aura especial a este sector, dándole una magia muy especial, se ha visto revolucionada sin ferias internacionales y con catas online, todo ha cambiado ya.

De repente, lo que había sido un modelo de negocio exitoso ahora era todo lo contrario. Quedando totalmente fuera de lugar para los tiempos sin precedentes en los que vivíamos. El sector ha tenido que adaptarse y moverse rápido, para seguir teniendo un negocio vivo al que volver una vez que terminara el bloqueo y el confinamiento.

Todos vemos esta imagen más de lo que nos gustaría ….

Ir directo al consumidor y nueva alianzas.

Todo lo que estamos aún viviendo, ha significado que algunos distribuidores, nacionales e internacionales, se hayan visto obligados a ir en contra de sus principios normales y comenzar a vender directamente al consumidor.

Muchos importadores tradicionales prácticamente han pasado, y casi de la noche a la mañana, de ser un proveedor puramente en el comercio a establecer su propia plataforma de comercio electrónico desde marzo de 2020.

 El sector ha visto como es necesario trabajar la onmicanalidad y lo importante que es dotarla de contenido a partes iguales, ya que la parte online ha venido para quedarse y ambas vías de comercialización deben ser complementarias.

Muchas bodegas que reusaban de las tiendas online, incluso de crear su propia tienda online en la web, han visto como ha sido una via rentable para dar salida a sus productos y como cada vez va incrementando el porcentaje en las ventas totales, además es una venta sin intermediario en muchos casos, y en la que se cobra por anticipado.

Según estudios de wineintelligence, desde el punto de vista del consumidor, casi el 90% volverá a sus hábitos de compra y de consumo anteriores a la pandemia, pero hay un creciente 10% que ha descubierto otras opciones online, que les resultan muy convenientes e interesantes, por lo que van a incorporar esa nueva forma de adquirir vinos, en muchas ocasiones desconocidos, mediante tiendas y plataformas de venta online cuando la normalidad vuelva a nuestras vidas.

Esta pandemia también ha demostrado que el vino es una prioridad para el consumidor internacional, ya que ha crecido su consumo, dando lugar a nuevos momentos de consumo: asociado a momentos de desconexión, de relax en el hogar, de recompensa tras una larga jornada frente al ordenador y todos estos momentos nuevos crearán hábitos de consumo.

También es un buen momento para crear alianzas en el delivery con restaurantes locales o con cadenas, ampliando la oferta de servicios y creando campañas de promoción de nuestros vinos para que sean incluidos en la carta que les ofrecen. El sector debería alcanzar estas alianzas estratégicas con esta reciente forma de consumo de comida (no fast food) y vino en casa y en grupos de menos de 6…

La creatividad es un imperativo hoy en día.

Es ahora cuando las marcas deben hacer un esfuerzo adicional en marketing también, ya que estar cerca de nuestro cliente en estos tiempos tan delicados y que nos hacen tan vulnerables a todos, creando momentos especiales y campañas emocionantes, comercialmente reforzará nuestro recuerdo de marca en su mente y reforzará los vínculos con nuestros clientes, que se prolongará en el tiempo.

Aumentemos el valor añadido de nuestros vinos y echemos raíces en el corazoncito de nuestros consumidores.

La inversion en marketing ahora es mas rentable que nunca.

Como siempre digo, debemos comunicar y enfocar todos los mensajes, poniendo en el centro a nuestro cliente potencial y debemos saber atraerle por los beneficios que le vamos a reportar con nuestros productos.

Si necesitas encontrar ese argumentario de ventas que cree los vínculos para alcanzar a tu publico objetivo, hablemos.

¿Está tu marca y tu imagen transmitiendo singularidad y diferenciación que le doten de un valor añadido? Si crees que es posible mejorarlo y ser mas efectivo, escríbeme.

Que la fuerza os acompañe!!